Participó en la Escuela de Verano de Harvard para maestros cubanos en 1900. Sin embargo, su carrera dentro de la iglesia cristiana continuó y tras el regreso a Cuba fue nombrado Secretario del Obispado de La Habana y Fiscal del Tribunal Eclesiástico. A estos cargos renunció para iniciarse en el Ministerio Pastoral. Se hizo cura párroco de Santa Isabel de las Lajas, en Cruces, Cienfuegos; y vicario foráneo de Sagua la Grande.
El 10 de julio de 1907 fue elegido como Segundo Obispo de Pinar del Río.

Sobresalió por dedicarse a la construcción de numerosos templos e iglesias dentro de Cuba. En 1912 reedificó las iglesias de Candelaria y San Cristóbal, en Pinar del Río. En 1914 construyó la Iglesia de Paso Real de San Diego y la incorporó como auxiliar a Los Palacios. También logró la reconstrucción de la iglesia de Las Martinas, Pinar del Río, la cual había destruido un huracán en 1910.

El 11 de enero de 1914, Ruiz estuvo en la inauguración del ferrocarril en Corralillo, su pueblo natal.

Después de la renuncia de Monseñor González Estrada y quedar vacante la diócesis de La Habana, Ruiz fue designado Arzobispo de La Habana el 30 de marzo de 1925, labor que desempeñó hasta su muerte en 1940.
En 1933, el Arzobispo Ruiz realizó una visita de rutina al Papa. Tras regresar del viaje por Europa, pasó por Nueva York, y comentó a la agencia Associated Press su percepción sobre la incidencia de la iglesia frente a la política en la Isla: “En Cuba la iglesia y la política están completamente separadas", dijo. "No tenemos voz en estos asuntos ni la buscamos"(1). No obstante, mientras Ruiz fungió como Arzobispo la iglesia alcanzó una consolidación que no había experimentado en décadas anteriores, aunque tampoco existieron muchas críticas del clero hacia la situación política y social de Cuba.

En diciembre de 1938, Monseñor Ruiz se reunió con las Damas Isabelinas de Cuba para impulsar la creación de una escuela de ciencias sociales en la que se podían formar jóvenes que deseaban emprender la Acción Católica(2).

En noviembre de 1939 participó en las celebraciones por el Aniversario 50 de la Universidad Católica de América, en Washington, junto a múltiples representantes de la iglesia cristiana.

Su legado también se reflejó en la literatura. Escribió textos como Impresiones de un viaje a Tierra Santa y El Corazón de Jesús de Nazaret. Firmaba sus poemas con el seudónimo de Lucas del Cigarral y entre sus composiciones poéticas más recordadas quedó un tomo de versos titulado Liras y estrofas y el poema La Conquista Espiritual.

El 3 de enero de 1940 falleció en La Habana a causa de una cardiopatía.

Notas al pie:

1. The Boston Globe: Archbishop of Havana sailing there Saturday, 14 de septiembre de 1933.

2. The Catholic Advance, Wichita, Kansas: Train Cuban women for Catholic Action, 10 de diciembre de 1938.

Bibliografía:

1. The Sun, Baltimore: Havana Archbishop dead, 4 de enero de 1940.

2. Cabarrouy, Lázaro Sergio: 100 años del Obispado de Pinar del Río. Disponible en: http://www.guanajayweb.com/PdfPensador/N90/0010.pdf

3. Kirk; John M: Ante el volcán. La iglesia en la Cuba pre-revolucionaria. Revista Latinoamericana de Teología, Dalhousie University, Canadá. Disponible en: https://core.ac.uk/download/pdf/47263491.pdf